Provocaciones
Finalidad:
"Provocación", una invitación, una sugerencia, algo que despierta el interés por explorar, usar materiales y jugar.
Es una invitación a jugar libremente y donde como docentes podemos observar el momento en el que se encuentran nuestros alumnos a nivel de aprendizaje, juego simbólico, creatividad, desarrollo evolutivo, entre otros aspectos.
Edad recomendada:
Materiales:
Provocación 1: Serrín, letras, espátulas y rodajas de madera, moldes de formas, cuencos, cucharas, tronco seco.
Provocación 2: Confeti, formas geométricas de madera para ensartar, construcciones.
Provocación 3: Muñecas Orinal, baberos, platos, espátulas, bañera, pañales, gasas, jabón, frutas, coche, moto, biberón.
Provocación 4: Espejos, piedras de colores fríos traslúcidas, piedras redondas negras, tela de tul, plumas, vasos, lupa.
Descripción de la actividad:
Primer día de cole, ganas de ver esas caras, ganas de transmitir energía para este curso, ganas de ser y dejarlos ser, por eso quisimos para esta ocasión, para la primera vez que conocían su nueva clase y nuevos materiales, organizar provocaciones.
Aprovechando que las mesas están por cooperativo, y hay cuatro grupos, hemos hecho 4 provocaciones, todas distintas, utilizando el material que teníamos en el aula, y el que poco a poco hemos ido reciclando.
Y podemos decir, que ha sido un éxito. Ha sido un día lleno de emoción, de expectativas, de dejarlos ser, sentir y creer en ellos.
Porque… “Las cosas de los niños y para los niños se aprenden sólo de los niños” (Loris Malaguzzi)
Como dijo Francesco Tonucci, “Un buen juguete es aquel que, sin ser nada en concreto, puede ser todo”. Esta frase pretende mostrar que los objetos de nuestro entorno pueden ser beneficiosos en muchos aspectos del desarrollo y aprendizaje de los niños.
Cosas a tener en cuenta:
Siempre debe haber un adulto para supervisar que haya un buen uso del material. Por otro lado, el papel del docente consistiría, en primer lugar, en preparar un ambiente que sea visualmente atractivo para los niños, que les motive y les incite a jugar. En segundo lugar, sería observar. No invitar ni dirigir, dejamos que sean los niños quienes por medio de su curiosidad se acerquen. De esta manera comprobaremos los comportamientos y reacciones ante la provocación. Durante el juego, debemos dejar que sean los alumnos quienes establezcan el inicio y el fin de la actividad. Esto podrá percibirse en función del comportamiento de los niños, si se muestran cansados, aburridos o si por el contrario todavía se muestran activos.
Hemos utilizado materiales abiertos, pueden tener distintos usos.
La parte positiva de las provocaciones, es que no tienen objetivos predefinidos. Es decir, no esperamos que los niños reaccionen de una determinada manera. Por lo tanto, es una actividad de final abierto, en la que el resultado no estará bien ni mal.