Perfil del alumnado
El centro en el cual trabajo, acoge preferentemente alumnado procedente del distrito asignado, los alumnos provienen en su mayoría de familias nucleares compuestas por padres e hijos, aunque, también se va incrementando el número de familias monoparentales, reconstituidas, homoparentales, de padres separados, etc…
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El nivel académico de las familias puede considerarse medio-alto, las profesiones de los padres son diversas. Las familias tienen, en su inmensa mayoría, el convencimiento de que una adecuada formación académica es la puerta a un futuro más prometedor.
Los padres muestran disposición para la participación activa en la dinámica del colegio del que esperan, en consonancia con su propia formación humana y académica, que se haga posible una formación igualmente basada en valores morales y de respeto, valores entre los que destaca sobre todos ellos los valores sociales, además de los académicos.
En el contexto del aula se observan diferentes niveles competenciales ya que se mezcla alumnado con el nivel adecuado e incluso con rendimiento académico destacado, con alumnado con dificultades de aprendizaje, también se observan diferencias importantes en el hábito de trabajo y en la autonomía personal en el proceso de aprendizaje.
Como consecuencia de ello, nos encontramos con grupos muy heterogéneos, lo que supone un hándicap en el trabajo en el aula y la atención individualizada.
El Centro cuenta con un Plan de Atención a la Diversidad para el alumnado que por sus dificultades para seguir el currículo ordinario precise de atención más específica. Contempla medidas ordinarias como apoyo, programa de refuerzo, pudiéndose incluir otros que la normativa contemple, así como medidas extraordinarias para el alumnado con necesidades específicas.
El perfil del alumnado se caracteriza:
- En lo valórico: por el respeto a la diversidad, autodisciplina y responsabilidad, que desarrolla equilibrio emocional, criterios éticos, experiencia de fe cristiana, proyecto de vida, compromiso.
- En lo social: por la aceptación de sí mismo, adaptación al grupo y respeto al medio ambiente.
- En lo cognitivo: por un desarrollo creativo, crítico reflexivo y constructor de su aprendizaje, con habilidades y capacidades en la búsqueda de información, de resolver problemas, confianza en sí mismo, consciente de sus potencialidades y su formación personal.
La Educación Infantil es la etapa en la que se sientan las bases para el desarrollo futuro de las niñas y los niños tanto en su dimensión personal como social. En ella se cimentan los valores que hacen posible la vida en sociedad, se inicia la adquisición de hábitos de convivencia democrática y de respeto mutuo y se trabaja con los niños y las niñas para que, en el futuro, participen responsablemente en la vida social y ciudadana.
Mi papel en este caso es tratar de dar respuesta, en colaboración con los tutores, a las necesidades de todos los alumnos.
