Mandala de piscina

Finalidad:

Ayudar en el desarrollo y formación de la autoestima, interacción social, favorecer la expresión de sentimientos, comunicación, percepción y la organización, serena, tranquiliza, fomenta una personalidad  creativa e inventiva, facilitar la atención, concentración, psicomotricidad fina, coordinación óculo-manual, control postural, desarrollo de los sentidos, discriminación sensorial, diferenciar distintas texturas, etc...

Edad recomendada:

1-5 años ( debemos ser flexibles y tener en cuenta la edad evolutiva, no sólo la biológica)

Materiales:

Tapones corcho, palos depresores de diferentes colores y tamaños, azulejos piscina, piedras de colores, arandelas de madera, dos medios cocos, piezas sueltas de plástico y madera.

Descripción de la actividad:

Esta tarde he decidido llevar algunas piezas sueltas de nuestra colección a la piscina, mientras las niñas se bañaban, las he colocado en forma de mandala. Lola jugaba en la piscina con María, una amiga de nuestro bloque. Cuando han salido del agua y han visto lo que había en el césped...cada una ha reaccionado de forma distinta.

Ambas han dicho "¡que chulo, qué bonito!", María, la amiga de Lola dijo "¿podemos jugar? ¿cómo se juega"?, "como tú quieras", he respondido.  Cada una ha empezado de manera distinta, Lola ha simulado que cortaba las piedras grandes con un palo depresor,  María seguía mirando, sin saber que tocar, hasta que su juego ha empezado a ser meter piezas en un bote vacío, más tarde se la oía decir que estaba haciendo "una ensalada".

Alba, que también andaba cerca, se ha unido al juego agitando piezas, metiendo y sacándolas de los botes.

Ha sido fascinante ver cómo de esta provocación, cada una ha hecho su propio juego de manera distinta, pero, sin dejar de interaccionar entre ellas.

Cosas a tener en cuenta:

Siempre realizar la actividad bajo la supervisión de un adulto.

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